Aforos limitados, medidas de seguridad y una oferta imaginativa: la agenda cultural de Las Palmas de Gran Canaria se reactiva en este atípico verano de 2020, tras meses de confinamiento y restricciones provocadas por la crisis sanitaria de la COVID-19. El principal destino urbano de Canarias no ha dejado de respirar entre tanto, gracias a las convocatorias de ocio generadas en meses precedentes a través de la red. Sin embargo, la 'nueva normalidad' ha traído consigo la recuperación de unos espacios que se han convertido en los últimos años en recursos turísticos destacados en la capital grancanaria. A menudo vinculados con su prolija historia atlántica y su condición de urbe abierta y cosmopolita.
Conciertos regulares al aire libre
Así, desde el área de Cultura del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria se ha lanzado la iniciativa Cultura en Acción, con una renovada oferta de espectáculos gratuitos en emplazamientos emblemáticos. Es el caso del Castillo de Mata, Museo de la Ciudad del Mar y antigua fortaleza desde la que la ciudad se defendió del asaltó del pirata holandés Van der Does. O el Palacete Rodríguez Quegles, sede de la Sociedad de Promoción de la capital grancanaria e inmueble destacado en el entorno del histórico barrio de Triana.
En estas llamadas a la acción cultural el aforo es limitado y necesaria la reserva (a través de lpacultura.com), y en los espectáculos se cumplen las medidas de seguridad que se aplican en todas las nuevas convocatorias en la ciudad. Esto es, mascarillas, higiene de manos, distancia de seguridad... En la misma línea se incluyen los conciertos en el Pueblo Canario, complejo arquitectónico representativo de la llamada arquitectura neocanaria (diseñado por el artista Néstor Martín-Fernández de la Torre y su hermano, el arquitecto Miguel), en el barrio inglés de Ciudad Jardín.
Muy cerca se celebran los conciertos del ciclo Musicando, en el Auditorio José Antonio Ramos (en recuerdo del innovador timplista canario), en pleno Parque Doramas, en donde también se levanta el histórico y rehabilitado Hotel Santa Catalina (también un diseño de Miguel Martín-Fernández de la Torre).
Escenarios de prestigio
En un contexto más formal se recuperan en estos meses de verano los espectáculos en el Auditorio Alfredo Kraus y el Teatro Pérez Galdós, con las mismas condiciones de seguridad y con aforos controlados. El Auditorio, emblemático edificio diseñado por Óscar Tusquets y marca de identidad del extremo Oeste de Las Canteras (en el spot surfero de La Cícer), estrena programación en julio con los cómicos canarios Kike Pérez y Omayra Cazorla, para anticipar nuevos espectáculos en semanas sucesivas.
En el otro extremo de la ciudad, en las puertas del barrio fundacional de Vegueta, se levanta imponente el Teatro Pérez Galdós, que recuerda con su nombre que esta es la ciudad donde nació y creció el universal escritor canario (por cierto, muy crítico con este recinto en los tiempos en los que vivía en la urbe, por su entonces extrema proximidad al mar). El Galdós es un escenario de postín en la ciudad, estrena julio con el espectáculo Pioneras, presentado por Patricia Kraus, en lo que constituye la reapertura de su agenda.
El Teatro Cuyás, en el entorno de la Calle Mayor de Triana ha reactivado igualmente su oferta en verano: en julio, su patio al aire libre acoge varias propuestas musicales, entre las que se incluyen las de Mónica Santa Project y Víctor Lemes. El del Cuyás también es un regreso celebrado en la ciudad.
Nuevo espacio con pasado inglés
Aún más novedosa es la agenda programada en la Sala Cultural Miller, reconvertida como tal por el Ayuntamiento de la ciudad en el edificio del mismo nombre, en el icónico Parque Santa Catalina, entre el muelle y la Playa de Las Canteras. Miller debe su denominación a una antigua consignataria inglesa, ejerce habitualmente de trastienda del escenario de los grandes actos del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria... y desde este verano es recinto cultural, que estrena el 3 de julio el espectáculo México Sinfónico, con la Orquesta Sinfónica de Las Palmas.
Este espacio se ha diseñado para recuperar el sector cultural en la ciudad, algo que agradece el público, que podrá disfrutar de una programación gratuita de espectáculos de distinta naturaleza seleccionados a través de un proceso abierto en el que se registraron 320 propuestas escénicas.
El ala de Miller destinada a la cultura en la capital grancanaria se ha sometido a un proceso de reconversión total con incorporación de tecnología y elementos que garantizan avances energéticos y excelentes condiciones para las artes escénicas, teatro, danza y música
La asistencia a estas citas está sujeta a inscripción y se formalizará semanalmente a través de formularios digitales alojados en lpacultura.com.
Junto a Miller se levanta el Museo Elder de la Ciencia y la Tecnología, uno de los mejores emplazamientos para el turismo familiar en la ciudad, que también debe su nombre a una consignataria inglesa de la época de las carboneras y el tránsito constante de navíos británicos hacia África. Un museo reactivado culturalmente de forma parcial, mientras ejerce también de centro logístico para monitorizar la evolución sanitaria del territorio. Su oferta, no obstante, siempre es interesante para vivir la ciencia de forma intensa y cercana.
Museos con presente que miran al pasado
La oferta museística de la ciudad, no obstante, obliga a volver al barrio antiguo de Vegueta, en donde, por ejemplo, se ubica la Casa de Colón, antigua sede del Gobernador y hoy museo dedicado a los viajes del marino, que en sus primeros tránsitos hacia el Nuevo Continente se detuvo en la ciudad. También es un espacio imprescindible para acercarnos a la historia atlántica de Las Palmas de Gran Canaria, con una interesante colección pictórica... Y un enclave en donde descubrir más sobre las culturas precolombinas, con una sorprendente colección.
La Casa de Colón ya está en activo, como también ocurre con la Casa-Museo Pérez Galdós, en el barrio de Triana. La antigua casa natal y familiar el universal Don Benito nos regala un recorrido por su vida, sus inquietudes y su obra, impagable para el buen amante de la literatura.
De regreso a Vegueta, el Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM) nos recuerda la condición de nodo cultural tricontinental de la ciudad, con permanentes conexiones con el arte contemporáneo europeo, americano y africano. En la vetusta Calle Los Balcones, el CAAM, ya reabierto, exhibe hasta el 8 de noviembre las exposiciones de dos firmas relevantes del arte actual: el artista cubano Dagoberto Rodríguez y el dúo artístico afrogermano Mwangi Hutter.
En el CAAM ejerció de alma mater y primer director el artista canario Martín Chirino, inspirador de su vocación cosmopolita, en contraste con la interesante producción local moderna. De nuevo en un viaje hacia el otro extremo de la ciudad, la memoria del escultor permanece muy viva en la Fundación de Arte y Pensamiento que lleva su nombre, y que ocupa la antigua fortaleza del Castillo de La Luz, en La Isleta, en las puertas de Las Canteras. Un museo de nuevo en servicio, crucial para comprender la carrera de este artista singular, en un entorno único: un fortín que también fue bastión contra el paso de los corsarios.
Un festival imprescindible
Historia tampoco le falta a un certamen como el El Festival Canarias Jazz & Más, que se celebrará en las Islas entre el 31 de julio y el 15 de agosto, y que, como siempre, reserva parte de su agenda para Las Palmas de Gran Canaria. El festival se ajusta a los nuevos protocolos, con un cartel que, como de costumbre, concita la atención de los aficionados al género. En 2020 este evento será otro de los que estrenarán la agenda de Miller. Atentos a su programación en la ciudad.
Con todo, en su conjunto la oferta cultural de Las Palmas de Gran Canaria se caracteriza por poner en valor la producción local, tal como impone el momento (no sin destacadas excepciones, como ocurre con el Festival de Jazz): algo que permitirá que el público pueda descubrir el nivel y las inquietudes de un sector vigente y, como la capital grancanaria, muy vivo. Y más, en verano.