El calor del verano siempre es más llevadero en Las Palmas de Gran Canaria: “La famosa panza de burro permite mantener a lo largo del año una media de 22 grados centígrados de temperatura" en la ciudad, tal como explica el reportaje publicado estos días en la revista Esquire. Una publiación que dedica un amplio espacio a las virtudes del tiempo estival en la capital grancanaria, ilustrado con una foto panorámica de Las Canteras.

La "acumulación de nubes de baja altura, que actúa como una pantalla solar natural, provocada por los vientos alisios" merece la atención del magazine, que recuerda que "según un estudio de la Universidad de Siracusa (EEUU) de 1996, Las Palmas de Gran Canaria cuenta con el mejor clima del mundo", en el artículo firmado por Gustavo Higueruela.

La panza de burro también ha sido objeto de atención por parte del suplemento Status, de eleconomista.es: un reportaje ahonda en el efecto provocado por las "nubes que forman un manto protector" y que "consiguen disminuir las altas temperaturas" durante el verano en Las Palmas de Gran Canaria.

"En invierno la ciudad mantiene la misma temperatura", apunta esta publicación, en la que una foto de una gaviota sobre el atardecer de La Puntilla, en el extremo de Las Canteras, acompaña al contenido, publicado el pasado día 17, firmado por Carlota Reina.

La panza de burro, subraya Status, hace "que las temperaturas no sean tan extremas en verano y permiten así a locales y turistas disfrutar de estos meses. Los vientos alisios, que soplan desde el noreste, son los 'culpables' de esta acumulación de nubes a baja altura contra las áreas de las Islas. La ciudad, enclavada de forma estratégica en este contexto, puede beneficiarse de este fenómeno, que rebaja los efectos del calor más intenso del verano".

Bajo una imagen de una vista de la ciudad tomada desde el Paseo de la Cornisa, la revista digital explica que, debido a esta singularidad del clima en la urbe, "no es extraño encontrar en Las Palmas de Gran Canaria durante los días de mucho calor a muchos visitantes alojados en el sur que escapan de la canícula y buscan un alivio en la oferta cultural, de ocio o restauración que ofrecen lugares como el barrio de Vegueta o la playa de Las Canteras, en donde también se puede disfrutar con este clima igualmente apto para playa, y donde se pueden practicar distintos deportes en la arena o en el mar como surf o vóley playa".